Madres agricultoras del conocimiento
El evento contó con la participación de las contestadoras, sus aprendices y otras adultas, jóvenes y niñas de las comunidades. Contó también con el apoyo pleno de los hombres y jóvenes de Puerto Nariño, comunidad anfitriona, así como de los sabedores y autoridades de las otras capitanías de ASATRIZY.
Para el desarrollo del evento, las mujeres propusieron metodologías propias que resultan de la adaptación intercultural y que garantizan el respeto por las formas tradicionales de transmisión del conocimiento, en las que se promueve el uso de las lenguas locales y el aprendizaje a través del ejemplo y la práctica. Durante tres días, intercambiaron conocimientos en torno al cultivo, la historia de origen, la preparación y el uso de fibras y tintes vegetales empleados durante las ceremonias del calendario tradicional. El encuentro se caracterizó por la alegría, la colaboración y la participación activa de mujeres de todas las edades.
Es el espacio donde todas las mujeres nos damos cuenta de la importancia del papel que ejerce la mujer en la cultura en cuanto al manejo y cuidado de las chagras y los cultivos, las plantas de uso ceremonial, las danzas, los rituales y las prevenciones. Pero también la enseñanza de los valores culturales y la familia. Es el espacio donde reconocemos nuestra identidad y adoptamos un nombre: Muĩpurĩ pacoa, ketimahã romirĩ que se traduce literalmente ‘madres agricultoras del conocimiento’. Rely Mejía, representante de mujeres.


Para cerrar el evento, los kumús y sabedores ofrecieron una bella ceremonia de Dabucurí en la que se pusieron en práctica los conocimientos obtenidos, se fortalecieron los lazos comunitarios y se destacó el trabajo colectivo de la organización. Fue, además, una ceremonia de agradecimiento a las mujeres y, en particular, a las contestadoras por la generosidad con la que compartieron conocimientos.
De este encuentro nace un movimiento de unión de las mujeres de ASATRIZY en torno a las contestadoras y las mayores. Se afianza, además, el liderazgo de las mujeres cimentado en los conocimientos propios, que promete dar nuevo impulso a ASATRIZY y a la Kumuã Yoamarã en su deseo de proteger su territorio y de seguir siendo indígenas en el siglo XXI.
Este proyecto fue posible gracias al apoyo generoso del pueblo de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). El contenido de este sitio es responsabilidad del Centro de Estudios Médicos Interculturales (CEMI) y no necesariamente refleja el punto de vista de USAID o del gobierno de los Estados Unidos.
